El Colo Colo no pudo jugar su partido de la última jornada del Torneo de Apertura por el bochornoso espectáculo ofrecido por sus barrabravas y los del Santiago Wanderers, que se agarraron a golpes en el terreno de juego.
El duelo entre el Santiago Wanderers y el Colo Colo ni siquiera empezó porque varias decenas de hinchas radicales convirtieron el césped en un campo de batalla.
Los barristas pelearon con palos, piedras, cinturones, bengalas y todo lo que tenían a mano ante las cámaras de televisión y los flashes de los fotógrafos.