Eliud Kipchoge defendió el domingo su cetro en el maratón de Londres a un ritmo apenas ocho segundos más lento que el récord mundial e impuso una marca para la competencia.
El keniano de 31 años de edad completó los 42 kilómetros frente al Palacio de Buckingham en apenas dos horas, 3 minutos y 5 segundos.
"Me di cuenta que durante 30 kilómetros llevaba récord mundial, pero entre el 30 y el 40 perdí unos 20 segundos", dijo el ganador. "El récord será para otra ocasión, pero estoy contento porque impuse marca de la competencia".
Su tiempo fue más de un minuto más rápido que la marca previa en Londres, de 2:04:29, impuesta hace dos años por Wilson Kipsang, quien finalizó en el quinto puesto el domingo.
Más importante, con los preparativos de Kipchoge rumbo a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en agosto, logró el segundo maratón más veloz de la historia, solo detrás de la plusmarca de 2:02:57 lograda por Dennis Kimetto en Berlín en 2014.
"El público fue lo que me impulsó", reconoció Kipchoge.
Stanley Biwott terminó en la segunda posición a 46 segundos de Kipchoge, mientras que el etíope Kenenisa Bekele se ubicó tercero.
Mientras la competencia varonil se centró en la velocidad, la rama femenil incluyó un toque dramático.
Jemina Sumgong logró su primer campeonato al reponerse de una caída en una estación de hidratación a menos de 6,4 kilómetros (4 millas) de la meta, por lo que tuvo que sostenerse varias veces la cabeza en un rictus de dolor. Aselefech Mergia y Mary Keitany cayeron junto con la keniana, pero no pudieron recuperarse de la misma manera y quedaron fuera de las cuatro primeras.
Sumgong, de 31 años de edad, cruzó la meta en 2 horas, 22 minutos y 58 segundos, en tanto que la campeona defensora, la etíope Tigist Tufa, se ubicó cinco segundos detrás de la ganadora, seguida de Florecen Kiplagat.