Este domingo 04 de abril las afectaciones por el COVID-19 han comenzado a sentirse dentro del fútbol mexicano.
Es un hecho que la integridad de todos los que conforman el balompié nacional debe ser una prioridad sobre cualquier interés económico, pero es indudable que las consecuencias al detener el Clausura 2020 comienzan a notarse.
Después de tres semanas sin fútbol en el país, los diversos equipos que conforman la Liga MX han comenzado a tratar de solventar la crisis económica realizando ajustes salariales con sus futbolistas.
De momento, solo el América y los Bravos de Juárez han declarado que no planean hacer modificaciones en los pagos de sus jugadores. Pero aclararon que dejan abierta la posibilidad a que en un futuro cercano puedan hacer modificaciones.
Mientras que Puebla y los Diablos Rojos del Toluca aún meditan sobre la posibilidad de realizar esta acción. Aunque jugadores de La Franja como Nicolás Vikonis han declarado que han tenido algunos problemas económicos previos a la contingencia sanitaria.
Por otro lado, el Morelia y Tigres no se han pronunciado ante esta iniciativa, ya que solo han mandando mensajes de apoyo para enfrentar esta pandemia.