â¬ÜMemoâ¬" Vázquez y su misma piedra

Guillermo Vázquez (Imago7)

"Así se juegan las Liguillas". Palabras del técnico de Pumas,  Guillermo Vázquez, tras caer ante América el domingo pasado en CU, y aun así  avanzar a la final de la Liga MX, esa instancia cuya última vez que visitó fue con Cruz Azul.

Aquel desenlace del Clausura 2013 lidera el dramatismo y lo increíble en la historia reciente del futbol mexicano. A sus 48 años, Vázquez es el estratega mexicano más joven (sin incluir interinos) de este torneo, ya ha ganado un título, pero se le recuerda más por un subcampeonato, especialmente en estos momentos.

Quizá los â¬Üflashbacksâ¬" broten por lo memorable que fue la remontada de esa final. También es posible que influya la racha sin título de liga de Cruz Azul, aunque igual está la opción de que millones de aficionados Pumas temieron sufrir lo mismo que los cementeros en aquella final, y es que hubo piedras con las que â¬ÜMemoâ¬" tropezó en el Azteca y volvió a caer durante el pasado fin de semana.

No fue sólo que Moisés Muñoz fuera en los minutos finales al área rival (con Alejandro Castro en cancha), y que las Águilas marcaran goles con inferioridad numérica a los respectivos cuadros de â¬ÜMemoâ¬".

El exToros Neza tuvo primeros cambios con tintes ofensivos: Javier Orozco por Israel Castro en 2013 y Matías Britos por David Cabrera el reciente domingo, pero luego dio marcha a atrás; en la final ingresó Mariano Pavone y Rogelio Chávez por Teófilo Gutiérrez y Pablo Barrera, mientras el pasado domingo salieron Fidel Martínez y Eduardo Herrera por Daniel Ludueña y José Carlos Van Rankin.

Las salidas de gente de ofensiva  por mediocampistas o defensas no significa que fueran cambios para cuidar el marcador, pero la prioridad en resguardar su marco en los respectivos partidos sí resultan argumentos irrefutables.

"Todavía tengo una sensación como de coraje de porqué sufrimos tanto, sufrimos mucho, muchísimo. Por ahora no (estamos contentos), al menos yo no estoy contento por el partido muy malo que hicimos; tenemos muchas cosas que mejorar con respecto a la Final", dijo el defensor Gerardo Alcoba al término del 1-3 entre Pumas y Águilas.

Aquel Cruz Azul y este Pumas se resguardaron  en su campo, armaron menos de tres contragolpes y cedieron el balón y  la mediacancha al América, que tanto en 2013 como en 2015 tuvo más el balón en sus pies,  generó mayor peligro en el marco de los respectivos rivales  y lo hizo ¡con inferioridad numérica!

"Como sufrimos hoy (domingo) es impresionante, ellos jugaron mucho mejor, tenían más la pelota, llegaron más, pero ahora hay que corregir eso", añadió el capitán Verón.

Pero lo mejor para Vázquez está por venir. Tanto él como sus pupilos y los seguidores universitarios están ante una nueva oportunidad de tomar revancha, pues su trabajo les bastó para alcanzar la final ante Tigres, y que de paso el pupilo supere al maestro, Ricardo Ferretti.

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