La vida del paraguayo Salvador Cabañas cambió radicalmente en enero de 2010 cuando en medio de un pleito en un bar de la Ciudad de México recibió un disparo en la cabeza, lo que lo imposibilitó para poder seguir jugando en el fútbol profesional, en el mejor momento de su carrera.
A pesar de todas las complicaciones que tuvo tras su recuperación, Cabañas llegó a jugar en un equipo de tercera división en Paraguay y llegó a ser anunciado en el 2014 con el Tanabi, un equipo de Sao Paulo, los años han pasado y la vida ha cambiado completamente para el exdelantero de las Águilas del América.
Así, Dionisio Cabañas, padre de Salvador y quien vive con él en Itauguá, un pueblo situado a 30 kilómetros de Asunción, habló para ESPN Brasil y señaló que su familia aún busca respuestas sobre lo sucedido hace seis años.
"No sabemos lo que pasó. Salvador siempre decía, papá mamá, estén tranquilos y de repente esto pasó. Todavía buscamos una explicación", dijo el padre de Salvador.
El sueño de volver al fútbol profesional sigue en la mente de Cabañas, aseguró su padre, quien señaló que hay un problema que impide que se cumpla el deseo de su hijo.
"Todavía quiere jugar al fútbol profesional pero está impedido. Salvador tiene un problema en su ojo izquierdo y le molesta", admitió Dionisio.
Sin embargo, el padre de Salvador, señaló que le molesta el hecho de que las personas e instituciones que fueron parte fundamental del exfutbolista cuando jugaba en la liga profesional, no lo hayan apoyado en los momentos difíciles.
"Ellos saben de todo el problema de Salvador, y hasta ahora no ayudan. No es que sus compañeros vengan a verlo. Eso incomoda a la familia. Antes él era amigo de todos, pero ahora que está así, nadie se aparece ni para decirle hola", detalló Dionisio Cabañas.