El tenista local Stan Wawrinka, primer favorito, se coronó campeón del Abierto de Ginebra, luego de vencer en una dura final al croata Marin Cilic, tercero en la siembra, con dos parciales que finalizaron 6-4 y 7-6 (13-11).
Wawrinka se adueñó de su tercer título del año, tras una hora y 58 minutos de juego, en los cuales Cilic se resistió a ofrecer con facilidad el cetro en disputa y para lo cual cometió pocos errores.
Sin embargo, el primer cabeza de serie sobresalió en el encuentro con una mayor precisión en sus servicios, 59 por ciento, y tras conectar cinco tiros aces y salvar dos de las tres oportunidades de quiebre de su oponente terminó por imponerse en la última prueba sobre la arcilla suiza.
Con dos mangas a su favor el campeón olímpico en Beijing 2008 concretó su participación en casa, coronándose con el décimo cuarto trofeo en su carrera, ante lo cual encarará Roland Garros 2016 con el impulso suficiente para plantarse con buen ritmo y defender su corona.