La marca de juguetes LEGO creó una réplica a tamaño real del deportivo Bugatti Chiron; tan real que se puede conducir.
Para su creación se necesitaron más de un millón de piezas LEGO y 13 mil horas de arduo trabajo. El resultado es sorprendente pues se lograron terminados de alta precisión.
Todos los detalles fueron cuidados, desde el diseño de llantas, volante y hasta el alerón trasero que además funciona como el modelo original.
A diferencia del Chiron real, la réplica apenas corre a 20 km/h, pues es impulsado por 2 mil 304 pequeños motores de LEGO Technic Power Function.
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