La mayoría de nosotros no somos capaces de recordar el día que nacimos o nuestras primeras acciones cuando éramos solo unos bebés; lo que recordamos de nuestros primeros años de vida suele ser escaso.
El hecho de que no podamos recordar cosas de esa época ha obsesionado a estudiosos y psicólogos, entre ellos Sigmund Freud
- ¿Nuestros primeros recuerdos realmente sucedieron o los hemos inventado? ¿Se puede recordar algo antes de tener las palabras para describirlo?
Los bebés absorben información a una velocidad impresionante, pero no son capaces de crear recuerdos sobre eventos concretos.
Las últimas investigaciones dicen que comenzamos a entrenar nuestras mentes dentro del útero. Pero, incluso de adultos, perdemos información con el tiempo si no hacemos nada para retenerla.
La amnesia infantil es resultado del proceso natural de olvidar las cosas, el cual experimentamos a lo largo de nuestra vida.
Los estudios:
- En el siglo XIX, el psicólogo alemán Hermann Ebbinghaus descubrió el rápido declive de nuestra capacidad para recordar lo que aprendemos: nuestros cerebros desechan la mitad de toda la información nueva en una hora.
- En la década de 1980, los científicos descubrieron que recordamos menos cosas de las que cabría esperar desde que nacemos hasta que cumplimos los 6 o 7 años.
- Lo anterior no le pasa a todo el mundo; nuestra cultura puede determinar cómo se forman y desarrollan nuestros recuerdos: Algunas personas pueden recordar cosas de cuando tenían 2 años, pero otras no recuerdan nada de lo que les pasó hasta que cumplieron 7 u 8 años.
- Egocéntricos. Según el país; la formación de los primeros recuerdos puede variar, de promedio, hasta dos años: La psicóloga Qi Wang, de la Universidad de Conrell, EE.UU., recopiló cientos de recuerdos de estudiantes chinos y estadounidenses:
-Los recuerdos de los estadounidenses fueron más largos, elaborados y visiblemente egocéntricos.
-Los de los estudiantes chinos fueron más breves y concretos. Y, en promedio, comenzaron seis meses más tarde.
- Algunos psicólogos dicen que la capacidad de formar recuerdos autobiográficos intensos sólo se desarrolla con la capacidad de hablar. Pero otros dicen que no hay diferencia entre los niños que nacen sordos y crecen sin lenguaje de signos en los registros de sus primeros recuerdos, por ejemplo.
- Esto conduce a la teoría de que si no tenemos recuerdos de nuestros primeros años de vida es porque nuestros cerebros no habían desarrollado ese sistema.
- Elizabeth Loftus, psicóloga de la Universidad de California, EE.UU., dice que "la gente puede visualizar eventos que no ha vivido; así, se convierten en recuerdos".
Aquí más notas: