A este chico se le pasó la mano (la pierna, en realidad), por andar presumiendo lo fuerte y resistente al dolor que es. Tristemente, su intento le salió MUY mal.
Él mismo se llamaba "piernas de acero", y demostraba en videos cuánto peso podía soportar sobre sus piernas. En este, pretendía hacer pasar un auto sobre una de ellas y, al final, ¡terminó doliéndole muchísimo y hasta llorando!
Amigos, si no se van a aguantar, para qué se pasan de superhéroes.