Los papás de esta bebé de tan sólo 15 meses de edad colocaron una cámara en la habitación de la pequeña porque no podían explicarse por qué su hija aparecía por las mañanas en un pasillo de la casa, hasta que descubrieron que la niña y los dos perros de la familia se despertaban cada madrugada para que ella los alimentara.
En el video que revela la dinámica que tenía la niña llamada Chloe con los golden retrievers de la casa, Colby y Bleu, aparece la menor recibiendo lengüetazos de sus secuaces quienes son los que realmente logran abrir la puerta de la habitación.
Otra parte divertida del clip es cuando los canes le muestran el camino para salir del cuarto demostrando que la comunicación que existe entre ellos tres es de alto nivel.
Chloe y sus padres viven en Phoenix, Estados Unidos.
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