Metiendo su hocico entre una pila de equipaje, el perro Dog mueve la cola y señala una pequeña mochila verde. Dentro está la punta de un cuerno de elefante.
Durante mucho tiempo, los perros se han utilizado para detectar drogas y explosivos en los aeropuertos. Ahora, Kenia cuenta con cánidos especialmente entrenados para encontrar marfil y cuernos de rinoceronte, como parte de una estrategia destinada a atajar el tráfico ilegal.
- Los hocicos de los perros pueden detectar pequeñas piezas de marfil que de otra forma superarían los controles estándar del aeropuerto.
A comienzos de año, en sólo una semana, la brigada canina detectó cuatro bolsas de viajeros procedentes de China, Tailandia y Vietnam cargadas de marfil de contrabando.
Una sola pieza de marfil puede parecer muy poca cosa comparada con toneladas de colmillos. Pero cuando los perros logran hacer detecciones regulares y ayudan a cortar redes de caza y distribución ilegal, la diferencia es grande.