Autoridades de la ciudad de Nueva York garantizaron esta semana que todos los inmigrantes en proceso de deportación recibirán asesoría legal gratuita, sin importar su condición migratoria ni tampoco si cuentan con antecedentes penales.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, y la presidenta del Concejo Municipal, Melissa Mark-Viverito, anunciaron que la representación será posible gracias a una donación de 250 mil dólares destinados a sufragar los costos legales que no cubre la ciudad. De Blasio afirmó en una entrevista por televisión que los fondos, donados por individuos y grupos que prefieren el anonimato, resuelven una larga disputa entre el alcalde y Mark-Viverito, que luchó por otorgar defensa legal gratuita a cualquier persona que enfrente la deportación.
La disputa inició en abril pasado, luego de que De Blasio se opusiera a destinar fondos municipales, que ascienden a 16.4 millones de dólares, para sufragar la defensa de inmigrantes y residentes legales condenados por cualquiera de los 170 crímenes considerados como "delitos deportables".
Logran quitar condiciones
El alcalde había condicionado este financiamiento a la asistencia legal para inmigrantes interesados que no hubieran cometido ninguno de estos delitos. Por su parte, Mark-Viverito abogó para que los recursos fueran destinados a cualquier inmigrante que lo requiriera, sin ninguna condición.
Los 250 mil dólares obtenidos serán entregados directamente al Proyecto para la Unidad de las Familias de Inmigrantes de Nueva York (NYIFUP), que reúne abogados y servicios legales que proporcionan asistencia jurídica en procesos de deportación.
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