"El proceso de reestructuración económica iniciará desde el norte del país: por el sector petrolero e industrial" además de priorizar la seguridad de los ciudadanos, aseguró este sábado Juan Andrés Mejía, diputado de la Asamblea Nacional de Venenzuela, presidida por el opositor Juan Guaidó.
El mundo y los venezolanos no confían en Maduro, nadie está dispuesto a prestarle dinero a Maduro. Venezuela tiene en este momento una deuda de 130 mil millones de dólares, hemos hecho default de esta deuda con casi todos los acreedores y por supuesto nadie está dispuesto a prestarle a Venezuela si no cambian las condiciones". Juan Andrés Mejía, diputado de la Asamblea Nacional de Venezuela
Dijo, desde México, que el inicio de ese cambio con Guaidó como presidente, sin precisar cuándo llegará al poder, comenzará desde el norte venezolano, por el sector petrolero, comercial e industrial, y en el sur, con otorgar tranquilidad a los venezolanos amedrentados por el guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia.
El gobierno colombiano ha dicho que la guerrilla del ELN es protegida por el gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro. El mandatario chavista ha rechazado estas acusaciones y las considera pretextos del presidente colombiano, Iván Duque, para reiniciar relaciones.
- En octubre pasado, Maduro se dijo listo para renegociar la deuda con todos sus acreedores, bajo la condición que le permitan el acceso al sistema financiero internacional, impedido por las sanciones financieras impuestas por Estados Unidos.
Desde 2017 que se inició la aplicación de las sanciones de Washington a Venezuela, las entidades públicas que controla el régimen quedaron sin acceso a la banca internacional, lo que complica la realización de pagos, explican las autoridades venezolanas.
El viernes, miembros del Grupo de Lima realizaron conversaciones con Cuba para buscar una solución en Venezuela, informó el coordinador de este bloque de países americanos, Hugo De Zela.
El diplomático peruano se refirió al tema al informar sobre la nueva estrategia del grupo, anunciada la víspera tras una reunión en Canadá, de convocar a toda la comunidad internacional para propiciar una "salida pacífica y democrática" a una "crisis que se deteriora rápidamente" en Venezuela.