Familiares del pequeño sirio Aylan Kurdi, cuyo cuerpo ahogado sobre una playa turca se convirtió en un símbolo del drama de los migrantes, llegaron ayer lunes a Vancouver, Canadá, tras de recibir la condición de refugiados.
Tima Kurdi, tía de Aylan e instalada en Vancouver después de haber migrado a Canadá en 1992, recibió entre lágrimas a su hermano Mohamed -otro tío del pequeño-, a su esposa Ghousun y a sus tres hijos en el aeropuerto ante las cámaras de televisión.
La foto del pequeño de tres años ahogado estremeció al mundo, y en Canadá desató la polémica en plena campaña de las legislativas, donde los líderes debatían sobre la mejor forma de recibir a los refugiados.
Debido a las dificultades logísticas y administrativas, el nuevo gobierno canadiense acordó antes de Navidad que la meta de recibir a 10 mil refugiados sirios hasta finales de año debía ser pospuesta.
En total, se espera la llegada de 25 mil sirios a Canadá antes de finales de febrero, las mayoría apadrinados por familiares y organizaciones de caridad.