La Fiscalía General de Bolivia negó hoy que se haya solicitado una notificación o "ficha azul" a la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) en contra del expresidente Evo Morales, como afirmó el fiscal de La Paz, Williams Alave.
Nosotros, de manera formal informamos que no se ha solicitado la notificación azul, y el reporte que tenemos de manera directa por Interpol confirma ese hecho", aseguró el fiscal general Juan Lanchipa en una rueda de prensa en la ciudad de Sucre, sede de la dependencia de Bolivia.
Lanchipa también señaló que no ve conveniente la solicitud a Interpol, y explicó que la ficha azul se realiza cuando no se conoce el paradero de una persona investigada.
Tenemos conocimiento de la ubicación del señor Evo Morales por lo cual no es necesaria esa solicitud , insistió.
La aclaración de Lanchipa se produjo horas después de que el fiscal de La Paz informó que se activó la notificación azul, "lo que significa que esta persona (Evo Morales) está siendo investigada y las policías internacionales lo que hacen es conocer de esa investigación que se tiene a efecto de tomar en cuenta para cualquier tipo de circunstancia .
De acuerdo con Interpol, una ficha azul tiene como objetivo "localizar", "identificar" y "obtener información" sobre una persona de interés en una investigación criminal, reportó el diario La Razón.
Morales, quien se encuentra asilado en México desde el pasado 12 de noviembre, enfrenta varias denuncias en Bolivia por los delitos de sedición, terrorismo, financiamiento de terrorismo, alzamiento armado e instigación pública a delinquir, entre otros.
Una de las denuncias contra el exmandatario boliviano fue presentada por el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, y otra por el ahora director del Fondo Indígena, Rafael Quispe.
La víspera, Evo Morales señaló desde su asilo en México que la Interpol emitió una orden de búsqueda internacional en su contra con ficha azul en 10 naciones por varios delitos, y anunció la conformación de un equipo de juristas para asumir su defensa.
Morales renunció a la Presidencia el pasado 10 de noviembre, en medio de acusaciones de fraude en los comicios del 20 de octubre, en los que fue declarado ganador para un cuarto mandato consecutivo, lo que detonó una crisis social y política en el país andino, Bolivia.