James Harrison es el héroe de más de dos millones de bebés a los que pudo salvar con las donaciones de sangre y plasma que realizó por más de 60 años. El australiano anunció que se retira de esta noble labor debido a que ha superado la edad límite para ser donante.
Harrison pudo ayudar a salvar la vida de los pequeños porque los médicos le encontraron un raro anticuerpo en su sangre que permitió desarrollar un tratamiento a favor de los bebés que padecen la enfermedad hemolítica del recién nacido o EHRN.
En las más de seis décadas James, de 81 años de edad, salvó a 2,4 millones de bebés y realizó 1,172 donaciones, 1,162 del brazo derecho y 10 del brazo izquierdo.
Así nació su misión
Harrison se despertó de una complicada operación cuando tenía 14 años. Los médicos le retiraron un pulmón y requirió 13 unidades de sangre. La experiencia ocasionó que tomara la decisión de realizar las donaciones cada vez que pudiera e inició a los 18 años.
De acuerdo con las propias palabras del australiano, los médicos le pidieron convertirse en su "conejillo de indias" una vez que descubrieron la propiedad mágica en su sangre. Los investigadores lograron desarrollar la vacuna Anti-D a partir del plasma donado misma que fue administrada por primera vez hace 51 años. "Cada ampolla de Anti-D tiene a James en ella", comentó un integrante del proyecto que involucra a Harrison.
La EHRN...
La Enfermedad Hemolítica del Recién Nacido es un transtorno que se desarrolla cuando la mujer embarazada produce anticuerpos en la sangre que destruyen los glóbulos rojos del feto.
Suele presentarse cuando la madre y el bebé tienen tipos de sangre diferentes. El transtorno no afecta a la madre pero sí puede provocar que el bebé se vuela anémico, se perjudique su desarrollo, padezca ictericia e incluso muera.
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