Un joven alemán se valió de sus jeans para usarlos como salvavidas y no morir en alta mar. El hombre se precipitó al caer de su yate, a nada menos que a 28 kilómetros de la costa y para sobrevivir usó sus pantalones que le ayudaron a aguantar durante tres horas y media sin hundirse.
Los rescatistas que lo ayudaron al verlo en peligro en las aguas de Nueva Zelanda, se sorprendieron al darse cuenta de la improvisación del joven, que con asombrosa frialdad, adaptó sus pantalones vaqueros como una especie de chaleco salvavidas.
El alemán ató la prenda a sus tobillos y muñecas como si se tratara de un flotador, técnica que evitó que se hundiera y agotara sus energías.
Su situación fue avistada por un helicóptero, fue cuando entonces entró en acción el equipo de rescatistas que lo mantuvo sano y salvo.