Maria Butina es una joven rusa de 29 años que fue detenida el fin de semana en Estados Unidos y es acusada de actuar como "agente no declarado de un gobierno extranjero" y de "conspirar" para infiltrarse en organizaciones políticas estadounidenses "para promover los intereses de la Federación Rusa", de acuerdo con la denuncia presentada por el Departamento de Justicia estadounidense, en lo que parece una historia sacada de una película de espías durante plena Guerra Fría.
- Se sabe que la mujer utilizó el sexo como herramienta para lograr su cometido.
Aunque ya operaba en Estados Unidos desde 2013, Butina ingresó a ese país en 2016 con una visa de estudiante para seguir un curso en la American University (UA), en Washington, y desde su llegada fue puesta bajo vigilancia por el FBI.
La acusación sostiene que ese plan fue calculado y paciente bajo la dirección de un alto funcionario del gobierno ruso, cuyo nombre no se revela en el escrito judicial; sin embargo, medios estadounidenses aseguran que se trata de Alexander Torshin, vicegobernador del Banco Central ruso y está vinculado con los servicios secretos del país euroasiático.
El objetivo de Butina fue infiltrarse en el aparato político de EU, incluida presuntamente la poderosa y conservadora Asociación Nacional del Rifle, y establecer canales de comunicación secretos entre políticos estadounidenses y Rusia.
- Pudo hablar brevemente con Donald Trump en un acto en 2015, entonces un candidato electoral, sobre su visión de política exterior.
El escrito judicial menciona a un ciudadano estadounidense, que el documento no identifica y cita como Persona 1, como operativo político al que la mujer contactó en Moscú, en 2013, y que la ayudó a organizar encuentros con figuras políticas en EU, además de entablar una relación sentimental con él.
El sexo, como herramienta para infiltrarse
En documentos obtenidos por el FBI, la supuesta espía se quejaba de vivir con él y expresaba desdén , pero lo veía como un aspecto necesario de sus actividades .
El documento de la Fiscalía también revela que, en al menos una ocasión, Butina ofreció sexo a un individuo, a cambio de una posición dentro de un grupo de presión , señalan los fiscales sin entrar en detalles.
Originaria de Siberia, Butina publicó frecuentemente fotos en las redes sociales en las que aparece manipulando armas para denunciar la estricta regulación de acceso a las armas de fuego en su país.
- Los documentos de la denuncia afirman que Butina poseía un pase VIP para eventos de la Asociación Nacional del Rifle (NRA).
Pero las autoridades estadounidenses se concentraron en los múltiples contactos que mantuvo a partir de 2015 con el poderoso lobby local de armas, la NRA, una entidad estrechamente ligada al Partido Republicano.
Un juez ordenó encarcelar a Butina sin derecho a fianza en lo que inicia su juicio.
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