Macron renunciará a su pensión para dar el ejemplo en Francia

Ciudadanos de Francia llevan semanas manifestando su rechazo en contra de los cambios a pensiones propuestos por Macron. Foto: Reuters.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció este domingo que renunciará a la pensión que le da el Estado, ya que está seguro que el sistema de pensiones que el Gobierno propone será más efectivo que el que existe, por lo que se atendrá al nuevo funcionamiento.

El presidente Macron no percibirá los seis mil euros que le corresponden a cada expresidente de Francia, ni los 13 mil quinientos que le depositarían como salario por formar parte del Consejo Constitucional, como indica la tradición en su país, informó la exclusiva del medio Le Parisien.

  • Macron expresó que pretende ser coherente con lo que ha solicitado su Gobierno a los ciudadanos de Francia: que cambiarían de régimen de pensiones, eliminando los 42 sistemas especiales que hasta ahora protegían a los empleados.

El presidente Macron será el primero en la historia de Francia en renunciar al dinero que estipula la ley nacional para los antiguos mandatarios, aunque su propuesta no fue bien recibida por sus opositores.

La oposición

Jean-Luc Mélenchon, miembro del Partido Comunista de Francia, aseveró que tomar esa decisión es fácil para quienes cuentan con recursos --Macron es banquero-- ya que no requieren del dinero de su pensión para vivir, pero para la mayoría de los trabajadores este ingreso es necesario.

  • El político de izquierda calificó este acto de demagogia y resaltó que la jubilación no se trata de un privilegio para los trabajadores, es necesario para que puedan tener una vida digna, afirmó Le Monde.

Mientras tanto las manifestaciones en Francia en contra de la nueva ley de pensiones de Macron continúan: pretende homologar las adquisiciones de los trabajadores a un sistema de puntos que se suman por cada periodo trabajado que se traducen en una cantidad de dinero específica.

Los trabajadores que se oponen a la reforma aseguran que este sistema ignora las particularidades de cada trabajo, como sus riesgos y demandas, lo que dañará a los trabajadores en el futuro. Las manifestaciones incrementaron en el último mes, lo que ha colocado al Gobierno en una difícil posición, ya que las huelgas han complicado el transporte en el país, sobre todo.

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