Parece que se ha vuelto costumbre que la primera dama de Estados Unidos, Melania, desprecié darle la mano a su esposo Donald Trump. Un nuevo e incómodo episodio sucedió cuando la pareja iba a descender del Air Force One en su llegada a la ciudad de Charlotte, en Carolina del Norte.
La situación se debió a que antes en Washington D.C., la pareja presidencial bajó de un vehículo para abordar la aeronave, pero los brutales vientos que superaban los 48 km/h dificultaron desde abrir la puerta hasta avanzar al avión y subir la escalinata.
Sin embargo, ante estas adversidades climáticas, Trump bajó del vehículo y no ayudó a Melania en ningún momento y subió él primero, sin mirar atrás.
Desde luego, la primera dama tuvo que sortear las dificultades del clima ella sola, arropada con un abrigo negro, añadiendo que además llevaba tacones altos.
Cuando llegaron a su destino e intentaron descender del avión presidencial, las imágenes muestran de manera evidente cómo la esposa del presidente Trump se resiste a darle la mano justo antes de bajar del avión.
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