Tras el anunció que hiciera el Pentágono sobre que los iraníes "lamentarán" nuevos ataques, el comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán, Hossein Salami, afirmó que no buscarán la guerra, pero advirtió a los enemigos que son "lo suficientemente poderosos como para derrotarlos repetidamente y no estamos preocupados".
Ante medios locales el comandante iraní destacó que las fuerzas armadas tienen el "poder para derrotar a cualquier enemigo no sólo en Irán sino también a liberar a cualquier musulmán bajo la tiranía de los arrogantes", y enfatizó contar con el apoyo del pueblo de aquella nación.
Las declaraciones del comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán se dan en el marco de los ataques realizados sobre instalaciones de Hashd, fuerza paramilitar dominada por milicias árabes chiíes respaldadas por Irán, que dejó como saldo 25 personas muertas.
Ante las acusaciones que hiciera el Gobierno de Estados Unidos respecto a las agresiones que sufrió su Embajada en Irán, orquestadas por grupos "respaldados por Irán" en territorio iraquí, el militar negó las acusaciones y confió que ante cada ataque a los iraquíes tendrá una reacción de su pueblo.
El militar señaló, también, que "el boicot" económico contra su país no ha derrumbado al gobierno y se mantienen con confianza en su desarrollo científico para destruir objetivos a miles kilómetros de distancia.
¿Por qué hay relaciones tensas con Irán?
En julio de 2015, Irán fue una de las seis potencias internacionales -Alemania, China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia- que firmaron el acuerdo nuclear conocido como Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA), mismo que limitaba acciones del programa nuclear iraní que, de violarlas, serían acreedores a sanciones internacionales.
Sin embargo, Irán abandonó los compromisos adquiridos con las seis naciones con el acuerdo nuclear, luego de la salida, un año antes, de Estados Unidos y la imposición de sanciones unilaterales en su contra.