Países de Asia central viven en peligro ante fuerte esmog registrado en ciudades

El nivel de partículas finas PM2.5, es decir de un diámetro inferior a 2.5 micrómetros. Foto: AFP

Los picos nevados a 5 mil se avistan apenas en la neblina amarillenta. Tanto en Almaty, en Kazajistán, como en Biskek, en Kirguistán, el esmog ahoga a ciudades ubicadas en plena naturaleza.

La capital kirguiza cuenta con tan solo 900 mil habitantes, mientras que la principal ciudad de Kazajistán tiene 1.7 millones. Ninguna de las dos dispone de una industria de envergadura. Y sin embargo, la calidad del aire es tan mala, especialmente en invierno, como en Nueva Delhi, en India o Lahore en Pakistán, ambas conocidas por sus problemas de contaminación.

El nivel de partículas finas PM2.5, es decir de un diámetro inferior a 2.5 micrómetros, alcanza de manera habitual umbrales juzgados peligrosos para la salud humana.

Kunduz Adylbekova, una militante ecologista que realiza esas mediciones, vive en uno de esos barrios alejados del centro de Biskek donde la contaminación es particularmente visible, con placas de nieve ennegrecidas y una bruma ocre que flota entre las casas.

"Veo como mis vecinos, mis amigos, tienen seguido enfermedades pulmonares, infecciones respiratorias agudas, alergias de todo tipo. Cada vez son más, de veras lo ves", dice, y precisa que el nivel de PM2.5 supera a menudo cuatro veces el umbral de alerta vigente en Estados Unidos.

En dos décadas, el deterioro de la calidad del aire en Biskek y Almaty, dos ciudades ubicadas en hondonadas al pie de las gigantescas montañas de Tian Shan, ha sido masivo, según los habitantes y los militantes.

Responsables del problema de contaminación

Si las vetustas centrales eléctricas a carbón, construidas en la época soviética, son responsables en parte del problema, otros factores más recientes agravaron el fenómeno.

En Almaty, donde los rascacielos levantados gracias al milagro petrolero desaparecen en un esmog amarillento, un factor clave ha sido el crecimiento exponencial del número de autos tras la caída de la URSS. Ese parque automotor está compuesto mayormente por viejos modelos muy contaminantes.