La alcaldía de París quiere que la ciudad siga siendo "la capital de romanticismo y del amor" pero sin candados ni cadenas en sus puentes, por lo que va a lanzar una operación para intentar disuadir a los turistas de esta práctica de moda.
Después de que los candados colonizaran el Puente de las Artes, los turistas comenzaron a colgar candados en el Pont Neuf (Puente Nuevo), el más antiguo construido en piedra que hay en la capital francesa.
Los enamorados cuelgan "candados del amor" para dejar un testimonio de su idilio, pero una parte del enrejado de la baranda ya se cayó vencida por el peso y las autoridades reemplazaron la reja por un panel de vidrio.
Bruno Julliard, vicealcalde de la capital a cargo de la Cultura, asegura que: "Los candados tapan las perspectivas sobre el Sena, una de las vistas más bonitas del mundo registrada por la Unesco"
En los próximos días van a instalarse paneles y una señalizaciones explicativos en francés y en inglés con consignas como "Sin cadenas, París les agradece" o "Declaren su amor de otra manera", explicó el representante local.
"Queremos que París siga siendo la capital del romanticismo y del amor y que las parejas de enamorados del mundo entero vengan a París, pero también hay que proteger el patrimonio. Se pueden demostrar el amor de otra forma que con un candado", agregó Julliard.