Sigue el peligro por volcán Taal; lanzó lava a 800 metros de altura

Apuntan probablemente a un ascenso de magma y podría llevar a más actividad eruptiva. Foto: AP

El volcán Taal cerca de la capital filipina expulsó este martes lava y temblaba sin parar, lo que probablemente apuntaba a una erupción más grande y peligrosa, mientras decenas de miles de personas huían de pueblos cubiertos por una densa capa de ceniza.

Las oficinas públicas y las escuelas cerraron en numerosas ciudades y pueblos, incluida la capital, debido a los riesgos para la salud que suponía la ceniza. Cientos de vuelos fueron cancelados o demorados, lo que afectó a decenas de miles de pasajeros.

La actividad en el volcán Taal y la aparición de varias fisuras nuevas en la tierra cercana, apuntan probablemente a un ascenso de magma y podría llevar a más actividad eruptiva, indicó el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología.

La lava incandescente lanzada por el volcán llegaba hasta 800 metros de altura, y en ocasiones se veía el destello de los relámpagos en la enorme columna de ceniza y escoria volcánica que salía del cráter.

El nivel de alerta desde el inicio de la erupción el domingo era de 4, lo que indicaba una erupción peligrosa posible en cuestión de horas o días. El nivel 5, el más alto, implica que esa erupción está en marcha.

Velocidad del magma es importante para detectar erupción

Este martes se detectaron unos 50 sismos volcánicos en un margen de ocho horas, lo que indica que el magma está subiendo, señaló el instituto. La entidad advirtió de la posibilidad de una intensa y prolongada caída de ceniza en los pueblos cercanos.

La velocidad en la subida del magma es importante para determinar cuándo habrá una fuerte erupción en el volcán, y si perderá velocidad y se detendrá. Por ahora, no vemos que la actividad esté perdiendo velocidad y los terremotos continuarán".

El pintoresco volcán se encuentra en medio de un lago en la provincia de Batangas, al sur de Manila. El domingo empezó a despertar con una poderosa explosión que provocó una columna de ceniza, vapor y rocas de 15 kilómetros de altura. Nubes de ceniza volcánica pasaron sobre Manila, que se encuentra 65 kilómetros al norte, y obligaron a cerrar el aeropuerto principal del país el domingo y parte del lunes hasta que remitió la caída de cenizas.