Después de haberse deslizado por un acantilado, un niño se quedó atrapado en una altura de casi 40 metros, los bomberos corrieron para auxiliarlo, logrando un sorprendente rescate.
Las imágenes captadas muestran al menor estancado en una grieta de la pared de piedra.
El hecho ocurrió en la provincia Gansu de China. El pequeño se deslizó de la montaña de 100 metros, consiguió agarrarse de la hendidura para mantenerse en la superficie hasta que llegó el rescatista para ayudarlo.
El bombero tuvo que descender desde la parte superior de la montaña para encontrarse con el niño y rescatarlo.
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