El Papa Francisco admitió este lunes que teme "el derramamiento de sangre" en Venezuela y que le "aterra" la violencia que podría desatarse por la crisis política en ese país sudamericano, así lo dijo en declaraciones a bordo del avión que lo condujo de Panamá a Roma.
"¿Qué es lo que me asusta? El derramamiento de sangre", aseguró ante los cerca de 70 periodistas que lo acompañaban.
El pontífice argentino reiteró que desea una "solución justa y pacífica" y reconoció que no se pronunciaba "sobre lo que hay que hacer porque sería una imprudencia pastoral de mi parte y haría daño".
Si yo entrara a decir hagan caso a estos países o a estos otros, me metería en un rol que no conozco, sería una imprudencia pastoral de mi parte y haría daño". Papa Francisco.
Francisco confesó que consideró mucho las declaraciones hechas cuando rompió el silencio sobre Venezuela durante su estadía en Panamá.