Una tremenda dosis de ternura despertaron estos pequeños osos polares gemelos en un zoológico de Rusia. Su comportamiento ha enamorado a los visitantes que al enterarse de su llegada, hacen filas para poder contemplarlos y llevarse la mejor imagen del par de crías.
Los bebés apenas cumplieron los tres meses de edad y acaban de aprender a caminar en días recientes. Sus pasitos son adorables ante la mirada de las personas que visitan el zoo exclusivamente para ir a verlos.
Los cachorros fueron captados mientras perseguían a su madre, dormían juntos, y a veces, se empujaban mutuamente para ganarse un lugar especial bajo el cobijo de su mamá oso.
Debido a la reacción natural que tienen los osos durante el proceso de crianza de sus hijos, los visitantes, sólo han podido verlos acompañados de su madre pues los machos suelen desaparecer de la escena cuando se trata de recién nacidos.
Los osos polares machos no suelen participar en la crianza de los cachorros. Es a la madre a la que le toca el rol de cuidarlos como una tradición nata de la especie.
El personal del zoológico aún no ha podido identificar el género de los ositos porque se esconde bajo la gruesa capa blanca de su pelaje. Se espera que en los próximos días la madre, llamada Gerda, reduzca su defensa para que puedan acercarse a los cachorros. Dentro de un mes, los osos podrán hacerse cargo de las caminatas por su cuenta.