En su origen, una variación del surf, 70 años después, un deporte olímpico; el patinaje o skateboard es una disciplina competitiva que raya en lo extremo.
La intención, es llegar sobre ruedas a cualquier rincón del planeta con diseño y estilo mexicano, todo lo que hacemos es tratando de rescatar las raíces, la cultura, nuestras costumbres , comentó a UnoTV el patinador profesional Brayan Coria en la Exhibición de Arte Deza organizada por la plataforma de creación y promoción de manifestaciones urbanas 900°, quienes exaltan los colores y diseños prehispánicos, uniendo creatividad y patinetas en un objetivo, la movilidad.
Deza o madera verde en Otomí, es la firma deportiva mexicana quien transforma estas patinetas en galerías de cuatro llantas, engrandeciendo así el valor del arte mexicano: arte huichol, xilografía e ilustración son ejemplo de técnicas que utiliza en sus creaciones.
Este emprendimiento mexicano encabezado por el profesional del patinaje Shadi Charbel, colabora con artistas emergentes, quienes retoman en cada una de sus piezas la identidad nacional.
Lo primero que me llevó a aceptar esta labor fue el hecho de que la juventud reconozca donde está pisando, donde nació, me he dado cuenta que hay mucho conocimiento muy interesante e importante por compartir con el mundo, comentó el artista textil Roberto León quien se ha especializado en arte huichol.
Skaters reconocen sus raíces e intentan llegar sobre ruedas a cada rincón del planeta con trabajos artísticos de México para mandarlos a través de concursos y exposiciones al mundo entero, comentó en entrevista Lissette Jassan socia fundadora de la promotora cultural 900° quien de la mano de Izza Peñafiel brindan espacio y difusión a este tipo de manifestaciones artísticas.
De acuerdo con los skaters el orbe entero podrá admirarlos cuando el patinaje callejero sea un deporte olímpico en 2020.
Volteas tu tabla y ves el logo, le limpias el polvo, todos esos momentos son súper gratificantes como patinador si estás utilizando una tabla con un diseño que te estimule placer cultural, aseveró Shadi Charberl quien ganó en 2008 los SK8 en Barcelona, España representando a México.
Un deporte que cuida el ambiente, evitando emisiones de dióxido de carbono al usarse como medio de transporte y que hace de México una pista de patinaje con raíces culturales y caminos por conocer.