La Villa Centroamericana fue construida en el año 1990, al oriente de la ciudad, en Tláhuac y, sirvió para alojar a los atletas internacionales que participaron en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, en México.
Años después, el Gobierno Federal vendió las viviendas a las familias de los burócratas. Sin embargo, tras el sismo del pasado 19 de septiembre, este es el panorama; departamentos a punto del colapso y calles llenas de grietas.
María de Jesús llegó a vivir después de los juegos, hoy lamenta lo acontecido.
Están ya todos los departamentos en declive, están inclinándose, y los departamentos de los vecinos de este lado, el piso se fue hasta el sótano , señala.
Cuando la Villa acaparaba la atención, incluso llegó a ser catalogada por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. Actualmente lo que queda de ella, es solo el recuerdo.
Durante un recorrido por la calle Pie de la Cuenta, Uno TV documentó que al menos seis casas podrían colapsar.
Ahora se sabe que estas viviendas fueron construidas sobre una falla geológica, la cual, de la mano del terremoto, también causó daños a sus vialidades y canchas de fútbol.
Esta enorme grieta, atraviesa toda la Unidad, además de que los comerciantes locales son los más afectados.
"El socavón del mercado que mide más dos metros es demasiado peligroso y en cualquier momento se puede hundir", comenta Viviana Arévalo, vecina del lugar.
Por si fuera poco, así luce la primaria Linaje Azteca . El peligro es evidente.
No han venido hacer un estudio del piso, solo checaron la estructura , señaló Viviana Arévalo.
La autoridad no les ha otorgado dictámenes, para saber si es que sus vidas corren peligro tras el sismo. Por ahora, solo les queda vivir en medio de la incertidumbre y la añoranza, de lo que fue la Villa para el evento de carácter internacional.