Los fibromas uterinos son tumores que crecen en el útero, pero no son malignos, pueden ser minúsculos y casi imposibles de detectar, pero también grandes y voluminosos, y muchas mujeres los pueden tener sin saberlo, puesto que alrededor de 70% no presenta ningún síntoma.
De acuerdo con Shannon Laughlin-Tommaso, ginecóloga y obstetra de Mayo Clinic, cuando los fibromas uterinos ocasionan síntomas como sangrado y cólicos, el tratamiento apunta a controlarlos.
Las alternativas de tratamiento normalmente se basan en la gravedad de los síntomas, así como en el tamaño y ubicación de los fibromas.
Subraya que, antes de decidir el tratamiento, es importante realizar una evaluación minuciosa para confirmar el diagnóstico de fibromas uterinos y verificar que realmente sean la causa de los síntomas.