La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) afirmó que la tortura sexual sigue siendo un serio problema en México y enfrenta un problema grave de impunidad.
Tras la visita a México de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizada el pasado 28 de septiembre, Tracy Robinson, comisionada Relatora Sobre los Derechos de las Mujeres dijo que es preocupante la situación del Estado mexicano y que la Comisión prepara un reporte detallado sobre la violencia sexual el cual será presentado en unos meses.
La Comisión también recibió información de múltiples casos de migrantes centroamericanos recluidos en prisión, quienes son incriminados de delitos bajo la obtención de confesión bajo tortura por parte de autoridades militares y policías, detalló Luis González Pérez, presidente de la CNDH.
Una de las recomendaciones de la CIDH y de la propia CNDH es la de adoptar una ley nacional sobre desaparición forzada y una ley nacional sobre tortura. Para ello, se deben adoptar todas las medidas necesarias para asegurar que tanto a nivel federal como estatal, la legislación y las prácticas se ajusten a los estándares internacionales en la materia.
"La tortura no se justifica en ningún caso". Luis González Pérez
Además, el presidente de la CNDH mencionó que la tortura sexual debe investigarse en todos los casos; particularmente, en aquellos en que las mujeres sean las víctimas y más aún cuando estén sometidas a detención.