La premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta Menchú, exigió mayor firmeza por parte de Gobiernos y sociedad para enfrentar embates contra la dignidad humana que significan las redadas contra migrantes ordenadas por el presidente Donald Trump en territorio estadounidense.
[Para estar informad@: No ha habido deportados de Estados Unidos: AMLO].
Tras firmar un convenio de colaboración entre su fundación y el Senado de la República, la embajadora de buena voluntad de la Unesco aseguró que existe alto riesgo de que la medida estadounidense se replique en otras partes del mundo, por lo que expresó una enérgica condena.
Debemos ser más enérgicos porque es una ofensa a migrantes. Lo que pasa en América puede replicarse en otras partes y no son buenas noticias. Confinamos a jóvenes y madres, y humillamos a personas. ¿Quiénes somos para pensar que el mundo nos pertenece?
El caso mexicano
Adelantó que diversos premios Nobel de la Paz se irán en septiembre a la zona de la frontera sur mexicana para contribuir a delinear una estrategia en el tema migratorio. Reconoció que la crisis en Centroamérica complica el escenario de atención al tema de movilidad irregular.
La desventaja de la anarquía global complica la situación; sabemos que hay violencia y crimen organizado. El punto es crear política que no impulse impunidad ni corrupción para delincuentes. Debemos aceptar que se vive una crisis muy profunda en (Centroamérica) .