Ante la inminente salida del Reino Unido (RU) de la Unión Europea (UE), esta organización está obligada a hacer una autocrÃtica profunda porque a más de 20 años de creada, ya exhibe fracturas, debilidades, contradicciones y asimetrÃas, lo cual hace pensar que ya dio lo que debÃa dar, al menos en la forma como actúa hoy, señaló Eduardo Rosales Herrera, profesor de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán de la UNAM.
Hoy muchos de sus paÃses miembros de la UE enfrentan problemas serios como endeudamiento, estancamiento, desempleo o empobrecimiento, mientras otros experimentan inmovilidad económica y hasta riesgo de deflación, expuso.
El PIB del RU probablemente irá a la baja, se calcula que en cerca de un 6%, porque experimentará una pérdida de ventajas comerciales y una reducción de inversiones de entre 3% y 4%. Esto será a mediano plazo, pues deben pasar dos años antes de la formalización del llamado "brexit", resaltó el investigador.
¿Europa necesita al Reino Unido?
Europa y el RU se necesitan mutuamente y en este periodo de transición se establecerán algunos mecanismos o tratados para minimizar el impacto de esta decisión, porque a ninguno de los dos les conviene una salida abrupta, sino negociada, subrayó el especialista en relaciones internacionales.
¿América Latina se verá afectada?
En el caso de América Latina, aquellos paÃses con mayor intercambio con Gran Bretaña ⬠en especial en Sudamérica⬠pudieran ver alguna afectación en materia de importaciones. "En México ésta será marginal, ya que su actividad comercial con el Reino Unido es de 0.65% y en esos términos el daño no es tan grave".
El brexit fue una decisión de la sociedad británica y debe respetarse porque está legitimada por un 72% del padrón que acudió al referéndum a expresar su voluntad. Ahora los gobiernos tienen que buscar los mecanismos para atenuar esta salida inminente y respetar una determinación soberana, dijo el académico de la UNAM.