Quizá has escuchado que consumir alimentos ultraprocesados es malo para la salud en general y que traerían consecuencias en el futuro, como la obesidad e infartos.
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Sin embargo, un estudio de la Universidad de Navarra, en España, reveló que el consumo regular de estos alimentos también está ligado a la depresión clínica:
- Trastorno del estado anímico en el que los sentimientos de ira, tristeza, pérdida o frustración prevalecen en las personas durante semanas
La investigación, publicada en la revista European Journal of Nutrition, es resultado de analizar por más de una década a más de 14 mil voluntarios que nunca habían presentado depresión, y en la que descubrieron que consumidores de alimentos ultraprocesados presentaban un incremento de padecer depresión del 33%.
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Se les comparó con los que tenían un consumo mínimo o nulo de estos productos, y detectaron que el efecto se intensificaba en personas con niveles bajos de actividad física. Proyectos previos revelaron que estos alimentos aumentan el riesgo de padecer hipertensión arterial y obesidad.
Ejemplos de alimentos ultraprocesados
Los alimentos ultraprocesados, según la clasificación NOVA (forma de catalogar alimentos según su nivel de procesamiento), son formulaciones industriales elaboradas a partir de ingredientes refinados o sintetizados como grasas trans y la proteína hidrolizada, entre otros.
Algunos ejemplos son:
- Refrescos azucarados
- Embutidos
- Postres lácteos azucarados
- Galletas
- Panadería industrial
- Cereales para el desayuno