Mala higiene bucal te puede provocar estos padecimientos

Una buena higiene bucal combate a 100 millones de bacterias por cada mililitro de saliva. Foto: Cuartoscuro.

Una mala higiene bucal podría aumentar el riesgo de tener diversos padecimientos, así lo dio a conocer Eduardo Álvarez Franyutti, director de una empresa dedicada al cuidado de la salud oral.

Posibles padecimientos

  • Ataques al miocardio
  • Desarrollar enfermedades degenerativas como Alzheimer
  • Incrementar la probabilidad de dar a luz a bebés prematuros

Eduardo Álvarez Franyutti explicó que en la boca existen unas 100 millones de bacterias por cada mililitro de saliva y si no se controlan a tiempo, de tal forma que pueden ingresar al torrente sanguíneo y afectar otras partes del cuerpo, por lo que es importante erradicar prácticas que fomenten la mala higiene bucal.

Estudios médicos revelan que en los últimos años, más de 50 enfermedades se han asociado a la mala higiene bucal por el ingreso de infecciones al torrente sanguíneo. Entre ellas se encuentran episodios cardiovasculares, partos prematuros, bebés con bajo peso e incluso disfunción eréctil.

El control de bacterias es aún más importante si se considera el tipo de alimentación de los mexicanos: alta en azúcares, carbohidratos, salsas, limón y refrescos, entre otros. Al aumentar el nivel de ácidos y toxinas en la boca, se favorece la aparición de bacterias.

La boca normalmente tiene un pH neutro y debemos tener un mantenimiento bucal para que la boca conserve ese pH óptimo. El medio ácido es propicio para la proliferación de bacterias y estas son las que generan gingivitis y periodontitis, que es una inflamación crónica, una infección, y si se combina con otros factores, generalmente asociados al estrés, puede potenciar otros problemas en la salud, explicó el odontólogo Carlos Monteagudo.

Algunas medidas que recomienda la OMS para llevar una buena higiene bucal

  • Cepillar los dientes después de cada comida y hacer uso del hilo dental para prevenir que las bacterias se acumulen en las encías y dientes.
  • Acudir al dentista mínimo una vez al año.
  • Cambiar el cepillo dental de manera regular, por lo menos cada 3 meses.
  • Tomar aguar. La saliva está considerada por especialistas como un protector natural de nuestros dientes, la falta de ésta podría aumentar la posibilidad de contraer alguna enfermedad.

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