Se estima que el Banco de México seguirá subiendo la tasa de interés hasta llegar a 9.75%; en Estados Unidos comienza a disminuir la inflación y eso es una buena noticia, un pequeño respiro temporal, opina Carlos Elizondo Mayer-Sierra.
Lo que tenemos claro es que hay un respiro, ojalá que sea definitivo. En Estados Unidos, la inflación bajó, en México, ese respiro todavía no lo vemos. Sigue una tendencia ascendente, menos acelerada que en el pasado, pero sigue subiendo.
México, en comparación con Estados Unidos, donde hay inflación, pero hay crecimiento, muestra un crecimiento anémico y una inflación que es, en buena medida, producto de bienes importados, pero con una canasta básica de productos de primera necesidad que va aumentando de precio.
Pero si el Banco de México no es agresivo y no manda una señal de que está dispuesto a secar aún más una economía que no crece mucho y a no permitir que el peso se devalúe en la medida en que los Estados Unidos están subiendo la tasa, esto puede a su vez alimentar la espiral inflacionaria.
Es una mala señal en el sentido de que los cinco integrantes de la Junta están viendo que esto debe de seguir por algún rato. Es una buena señal en el sentido de que están tomando la decisión y el gobierno federal no los está criticando, por justamente tomar una medida que tiene un costo económico para la actividad de quienes invierten y que, seca de recursos a quienes tienen un préstamo, etc.
¿Por qué aumentó Banxico la Tasa de Interés Interbancaria?
En su anuncio de política monetaria, Banxico incrementó la tasa de interés en 75 puntos base, respecto de su último informe.
En ese sentido, el organismo autónomo explicó que la decisión se debe a que la actividad económica mundial se debilitó durante el segundo trimestre e indicadores oportunos sugieren que esto continuaría en el tercer trimestre.
- La inflación global siguió aumentando, alcanzando nuevamente en algunos casos su mayor nivel en décadas, en un entorno donde persisten desbalances entre la demanda y la oferta en diversos mercados y precios aún elevados de alimentos y energéticos.
El Banco de México explicó que todavía hay diversas presiones inflacionarias como la pandemia del COVID-19 y la guerra entre Rusia y Ucrania.
En México, la inflación en julio se ubicó en 8.15 % manteniéndose en niveles “no observados en dos décadas”.