La deuda del agua ya es muy complicada

El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que el pasado martes elementos de la Guardia Nacional se retiraron de la Presa La Boquilla en Chihuahua, luego de que ésta fuera tomada por los pobladores

Los trabajadores del campo señalaron que no quieren perder más agua, misma que es enviada a Estados Unidos por un Tratado Internacional de Aguas entre México y “el vecino del norte”, pactado desde el año de 1944.

Carlos Elizondo opina que López Obrador lleva toda la vida haciendo lo mismo y lo sigue haciendo: los políticos tienen intereses políticos. La pregunta es ¿hay un mejor mecanismo para repartir los recursos fiscales en este régimen centralizado donde el presidente manda un presupuesto?

En el caso del agua se encogió también la cobija por el cambio climático, por la sequía que lleva buena parte en el norte del país, aunque en este caso el presidente está contra el Estado y la pared.

Nuestro analista opina que sí hay un tratado que hay que cumplir pero no han encontrado un mecanismo para hacer creíble lo que AMLO dice, que aún dando el agua a los Estados Unidos, los campesinos no se van a quedar sin agua.

Opina Elizondo-Mayer Serra que nuevamente les ganaron los tiempos, no prepararon algo que se sabía, que debíamos agua y ahora tienen la situación muy, muy complicada.

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