La polarización llegó a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos

Javier Solórzano dice que la polarización en la política realmente existe en México y en varios países de América Latina y pone de ejemplo el reciente triunfo de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil, quien aseguró que “gobernará para todos” y no lo hará por quienes sólo votaron por él.

El periodista menciona que esto es un buen ejemplo que quizá debería entenderse de la política dentro de las diferencias: se gobierna para toda una sociedad y señala la polarización que se ha agudizado en México y aunque en ocasiones se niegue hay algo importante en este sentido.

“También la polarización del discurso se ha vuelto algo de primerísima importancia porque el discurso hace que la palabra también pese, engaña, castiga y duele”.

Javier Solórzano

Ante eso, Solórzano retoma lo que hizo la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), encabezada por Rosario Piedra, la cual ha costado mucho construir y defender y de repente, en los últimos años, está jugando uno de sus peores roles que ha tenido en su historia desde que se creó a principios de 1990 y la razón es que se ha ideologizado.

“En lugar de que la Comisión esté preocupada por defender los derechos humanos, a las mujeres frente a los feminicidios, a los periodistas y los abusos del poder acaba entrando en un terreno de ideologización delicado y grave”.

Javier Solórzano

El periodista recuerda lo que publicó la CNDH el domingo pasado cuando arremetió contra del INE y califica el texto como cargado de ideología y ataques sin hacer un análisis preciso de las cosas y en un discurso que es igual al del presidente, sumándose a la narrativa donde la palabra juega un papel.

Y en medio de esta polarización, asegura Solórzano, la “palabra se ha convertido en un problema serio y que esto ha construido altos niveles de polarización”.

“Tenemos que pensar en medio de todo esto qué haremos con la CNDH, pero como está, dejó de funcionar y si hay que deshacerla hay que hacerlo y hay que reconstruirla, pero en un país en dónde la violación de los derechos humanos, la agresión a los periodistas y el ataque a las mujeres es fundamental que una Comisión Nacional de los Derechos Humanos se dedique a defender más que estar a imagen y semejanza de un presidente”.

Javier Solórzano
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