Los días agitados en el Senado por la reforma al Ejército

Martha Anaya señala los días agitados que se vivieron en el Senado en torno a la votación para que el Ejército permanezca en las calles hasta 2028, donde hubo desde gritos hasta lágrimas.

La analista menciona que algo que le llamó la atención fueron las vulgaridades que se escucharon en el Senado hace unos días durante la sesión, donde se aprobó la extensión del plazo al Ejército, y éstas provinieron de las mujeres, en especial de la senadora del PAN, Lilly Téllez, que usó un tono provocador, vulgar y vil para referirse a los legisladores de Morena, quienes no tardaron en reaccionar.

Como una senadora que se le plantó en la tribuna diciéndole que no era corrupta y volviéndose una discusión “absurda” y “miserable”.

Anaya dice que es importante la permanencia del Ejército en las calles, pero no cree que llamarán a los secretarios de las Fuerzas Armadas a rendir cuentas y que habrá una comisión bicameral.

A pesar de los insultos en la tribuna del Senado, la analista rescata los buenos argumentos que dieron los del PRI, quienes estuvieron a favor y en contra como Beatriz Paredes, Claudia Ruiz Massieu y Jorge Carlos Ramírez Marín, y de los “morenos” dice que su nivel es “fatal” y el único que se salva es Ricardo Monreal.

“Días agitados que hicieron llorar a muchos, gritar a otros, aplaudir algunos y avergonzar a muchos más”.

Martha Anaya

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