¿Se rompió el pacto entre AMLO y Peña Nieto?
Durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, llamó la atención la ausencia de señalamientos hacia su antecesor, Enrique Peña Nieto, a pesar de que la lucha contra la corrupción fue su principal promesa de campaña.
No sólo evitó criticarlo, sino que “nunca lo señaló, nunca lo investigó, y al contrario, lo trató de manera muy respetuosa”, indica en su videocolumna Martha Anaya.
En ese periodo, incluso llegó a referirse a Peña Nieto como “licenciado” y lo calificó de “demócrata”, sugiriendo una relación basada en agradecimiento por no obstaculizar su llegada a la Presidencia. Por eso, desde hace años se especula sobre un pacto de no agresión entre ambos.
“Nunca señaló a Peña Nieto y eso que el sexenio del priista… se distinguió por el tema de la corrupción”, señala Anaya.
Pero todo cambió recientemente. En una de las conferencias mañaneras de la presidenta Claudia Sheinbaum, apareció el fiscal general de la República para anunciar una nueva carpeta de investigación contra Peña Nieto. La razón: declaraciones de empresarios en Israel que afirman haber vendido el software Pegasus para espiar a periodistas y políticos mexicanos, a cambio de 25 millones de dólares.
“Nueva carpeta, vamos a solicitar todo, pruebas y demás”, dijo el fiscal.
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La velocidad con la que actuó la Fiscalía generó dudas. La columnista se cuestiona por qué se actúa con tal rapidez ahora, cuando otros casos no han tenido el mismo tratamiento.
Otro dato clave es que este anuncio ocurre poco después de que Peña Nieto rompiera el silencio al aparecer en un documental sobre la cancelación del NAIM, el aeropuerto de Texcoco.
“Nos acusaron de corrupción… y no hay una sola prueba, ni una sola investigación”, dijo Peña Nieto.
La sincronía de los hechos ha reavivado las sospechas. “Apenas rompió el silencio, Peña Nieto, boom, aparece el gran fiscal en la mañanera”, concluye Martha Anaya.
