Carga de trabajo obliga a empleadas a vivir en panteón de CDMX

Para proteger a sus familias, ellas decidieron vivir en su lugar de trabajo, el panteón Xilotepec, el más grande de Xochimilco en la Ciudad de México (CDMX). 

“Dejar de ir a casa para evitar contagios, tengo a mi madre, una persona adulta mayor” 

Alma Rosa Ugalde Martínez, trabajadora Panteón Xilotepec, Xochimilco

En ese sentido, Jenni Morones Torres, quien también es trabajadora del lugar relata que su papá es adulto, que tiene un hijo de 20 años y esa es la razón para quedarse a vivir en el panteón y así evitar un contagio en su casa. 

Con cubrebocas, caretas, lavado constante de manos, y la mayor distancia posible, Alma y Jenni, atienden a las personas que van a realizar trámites de familiares fallecidos. 

Alma recibe los documentos la cremación de los cadáveres, ella lleva cinco meses sin ver a su familia, el único contacto es por celular. 

“La misma carga de trabajo fue lo que nos hizo también permanecer aquí, el estar aquí tratando de atender a la mayor población posible, debido a la alta demanda de personas fallecidas” 

Alma Rosa Ugalde Martínez

Este fue otro motivo para adoptar al panteón como su segundo hogar, así como lo cuenta Jenni “si ya lo adoptamos de alguna manera así, como nuestro hogar, nuestra casa, los compañeros como nuestra familia”. 

Jenni, tuvo que ir a su casa por la enfermedad de un familiar, pero ya está de regresó. 

“Regresamos en el mes de diciembre cuando esto se empeora y otra vez nos quedamos ya a dormir aquí a estar aquí resguardadas”

Jenni Morones Torres

Sus compañeros de trabajo admiran su entrega y precaución. Por ejemplo, Esther Carreón Beltrán asegura que “yo las admiro, he admirado mis compañeras han tomado esta decisión y todo habla más allá de la responsabilidad”

Si le temen al COVID-19, pero con este acto demuestran que es más el amor que le tienen a sus seres queridos, por ello decidieron vivir en el panteón.  

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