La estimulación cerebral profunda mejora la vida de pacientes con Parkinson

Los implantes de estimulación cerebral profunda (ECP) pueden proporcionar un alivio a largo plazo para las personas con enfermedad de Parkinson, señala un estudio reciente.
Los pacientes de Parkinson que recibieron estimulación cerebral profunda tenían una mejor función motora, una mejor capacidad para manejar las tareas cotidianas y una mejor calidad de vida en general después de cinco años de tratamiento con ECP, informaron investigadores recientemente en JAMA Neurology.
¿Tienes una denuncia o información que quieras compartir? Escríbenos al WhatsApp de Uno TV: +52 55 8056 9131. Tu mensaje puede hacer la diferencia.
ECP ayuda a mejorar la función motora en pacientes con Parkinson
Los pacientes también pudieron arreglárselas con dosis más bajas de levodopa, el medicamento que toman para compensar la falta de dopamina en su cerebro, encontró el estudio.
“Por primera vez, podemos ver claramente que los beneficios de la ECP, las mejoras en los síntomas motores, la reducción de las necesidades de medicamentos y una mejor calidad de vida se mantienen a los cinco años”, señaló en un comunicado de prensa el investigador, el Dr. Adolfo Ramírez-Zamora. Es jefe de división de trastornos del movimiento en el Instituto Norman Fixel de Enfermedades Neurológicas de University of Florida Health en Gainesville.
En la estimulación cerebral profunda, se coloca un implante dentro del cerebro de un paciente para administrar pulsos eléctricos a regiones específicas.
Se ha demostrado que la ECP ayuda a mejorar la función motora entre los pacientes con Parkinson de moderado a grave, pero pocos ensayos clínicos han probado su efectividad a largo plazo, dijeron los investigadores.
La enfermedad de Parkinson es un trastorno progresivo del movimiento que provoca temblores, rigidez y problemas de equilibrio y coordinación.
Ocurre cuando las células cerebrales que producen la dopamina mueren o se deterioran, según el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento.
En este estudio, los investigadores siguieron a casi 200 pacientes en 23 centros de trastornos del movimiento que recibieron implantes de ECP en su núcleo subtalámico, una estructura cerebral clave en el control motor.
Los pacientes fueron asignados al azar para recibir estimulación inmediata de sus dispositivos o esperar 12 semanas antes de la activación.
Los resultados mostraron un mejor control motor, menos espasmos involuntarios y una mejor calidad de vida general durante los cinco años de seguimiento.
También pudieron mantenerse con una dosis 28% más baja de levodopa, que se mantuvo estable durante todo el periodo, según el estudio.
“La ECP solía verse como un último recurso, pero ahora sabemos que proporciona el beneficio más sostenido cuando se aplica en las etapas moderadas de la enfermedad de Parkinson, cuando las complicaciones motoras son la principal fuente de discapacidad“, explicó Ramírez-Zamora.
“Sabemos que esta terapia es efectiva y segura“, agregó. “El desafío ahora es asegurar su acceso a más personas en la etapa adecuada de la enfermedad, cuando puede tener el impacto más grande y duradero“.
El coinvestigador, el Dr. Michael Okun, director del Instituto Fixel, dijo que los hallazgos reflejan el potencial futuro de la ECP.
“El futuro de la ECP se enfocará en dispositivos más inteligentes, programación personalizada y mayor acceso“, comentó Okun. “Estudios como este no solo demuestran la durabilidad de la terapia, sino que también preparan el escenario para la nueva generación de tecnologías que mejorarán la vida de los pacientes”.
Autor: Dennis Thompson
Copyright © 2025 HealthDay. Todos los derechos reservados.
Te recomendamos:

Salud
Más de la mitad de los problemas de salud mental se desarrollan en la niñez y adolescencia: especialista

Salud
Médicos mexicanos utilizan la inteligencia artificial para tratar el cáncer

Salud
¿Ya revisaste quién te va a operar? 25 mil cirujanos plásticos ejercen sin certificación

