¡Cuidado con lo que tomas! Medicamentos de uso común pueden provocar alucinaciones

Si un paciente ve arañitas de diferentes tonalidades moviéndose sobre la pared, escucha la sirena de una ambulancia o siente que un montón de hormigas se le suben por brazos y piernas, y sólo él las ve o escucha, son alucinaciones, y éstas podrían estar siendo causadas por ciertos medicamentos de uso común, asegura la doctora Gisel Cano Arrieta, profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Medicamentos que pueden ser utilizados por cualquier persona pueden causar alucinaciones visuales, auditivas, táctiles, olfativas y propioceptivas. | Foto: Getty Images.

¿Qué medicamentos comunes pueden causar alucinaciones?

  • Metroprolol y propranolol: son antihipertensivos que son betabloqueadores y pueden provocar estados alucinatorios hasta en un 10 % de los casos. Son utilizados en pacientes con enfermedades cardiovasculares.
  • Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina: son utilizados para evitar la presión arterial alta, y se sabe que puede provocar alucinaciones a entre el 4 % y el 8 % de los pacientes.
  • Reserpina o la clonidina: se usan también para controlar la presión y pueden afectar hasta en un 5 % el hecho de tener alucinaciones en pacientes con daño preexistente en el sistema nervioso central, en el hígado o en el riñón.
  • Digoxina o digitoxina: los cardiotónicos que se utilizan en terapia intensiva para aumentar la fuerza del corazón en una situación de insuficiencia, causan alucinaciones en un 25 % de los pacientes, sobre todo en adultos mayores con daño renal o alteraciones en niveles de electrolitos, altos o bajos en calcio y potasio.
  • Dextrometorfano: es un antitusígeno usado comúnmente para ayudan a evitar la tos, pero en dosis altas pueden provocar cambios en la conducta senso-perceptual. Por eso también pueden ser “una droga de abuso”.
  • Fármacos para modular la respuesta inmune: son utilizados en enfermedades como artritis reumatoide, lupus, inflamación intestinal, rinitis alérgica, etcétera, pueden causar también un cuadro alucinatorio.
  • Difenhidramina: antihistamínicos como éste son usualmente utilizados para la alergia, pero si se usan en una dosis alta, provocan alucinaciones y “cuadros confusionales”.
  • Corticosteroides: ayudan a evitar una inflamación en una artritis reumatoide o en un lupus eritematoso, y pueden provocar alucinaciones visuales y afectar el estado emocional y afectivo, elevando el ánimo o provocando depresión.
  • Indometacina y el celecoxib: son dos antiinflamatorios no esteroideos ubicados dentro de los moduladores de la inmunidad, se utilizan mucho como analgésicos o antiinflamatorios de uso común, ya que no se requiere receta para conseguirlos, pero pueden generar un cuadro psiquiátrico.
  • Corticotropina: es una hormona que se usa en enfermedades metabólicas o endocrinológicas, cuando se tienen alteraciones en la producción de hormonas corticosteroides y también causa eventos alucinatorios.
  • Cefaloridina, la rifamicina o la isoniazida: son algunos tipos de antibióticos que pueden provocar este tipo de alucinaciones.
  • Fenitoína, la carbamazepina y el clonazepam: son utilizados para la epilepsia y así controlar las crisis, pero pueden generar cuadros de psicosis, depresión y cuadros alucinatorios.
  • Omeprazol, el lansoprazol, la famotidina, la ranitidina y la cimetidina: son fármacos para males del aparato digestivo y normalmente son bien asimilados. Pero cuando hay alguna enfermedad renal o falla hepática, y se trata de un adulto mayor, pueden ser la causa de un cuadro alucinatorio.

¿Por qué algunos medicamentos comunes causan alucinaciones?

Un fármaco puede provocar alteraciones en el sistema nervioso central, y en consecuencia, alucinaciones no por lo que contiene específicamente, sino por su capacidad lipofílica, la cual le permite atravesar la barrera hemato-encefálica, membrana de tipo grasoso que protege al cerebro.

Si la estructura o molécula del fármaco es proclive, por ejemplo, a bloquear receptores de la acetilcolina, también puede provocar alucinaciones, agrega Cano Arrieta.

Al entra en el sistema nervioso, alteran no su estructura sino su funcionalidad. Lo que sucede es que afectan a los neurotransmisores, que son los encargados de emitir señales en el cerebro a través de las neuronas. De ahí que se trate de un padecimiento funcional, no estructural, apunta Cano Arrieta.

Consecuencias

Cuando un paciente tiene alucinaciones como efecto secundario de un fármaco, hay que tratar no sólo la enfermedad de base, sino también el episodio psicótico o episodio alucinatorio, dice la experta, quien sostiene que “esto afecta su calidad de vida porque va a padecer ansiedad, depresión. Y así se dificulta “que tenga un buen apego al tratamiento de su enfermedad de base”.

Otra causa de alucinaciones es la polifarmacia, es decir, cuando el paciente toma varios fármacos de forma simultánea, por ejemplo: un analgésico antiinflamatorio no esteroideo, un citoprotector gastrointestinal, hormona tiroidea para tratar el hipotiroidismo, un antihipertensivo.

Por ello, la investigadora de la UNAM recomienda evitar esta práctica ya que, si de esa lista tres o cuatro tienen mayor afinidad al sistema nervioso central, es muy probable que esa misma interacción cause no sólo un cuadro de alucinaciones, sino también otro tipo de situaciones, como confusión, agitación psicomotriz y cuadros afectivos como manía, hipomanía, depresión, ansiedad y alteraciones en el ciclo del sueño.

Otros factores que junto con los fármacos pueden predisponer a alucinaciones o detonarlas son la edad, enfermedades preexistentes del riñón, del hígado, neurológicas como la epilepsia, demencia y depresión, así como algún trastorno de “índole adictiva”, principalmente alcoholismo.

Qué opinas