¿Por qué nos gustan los chismes?

Cuando escuchamos un chisme el cerebro se estimula imaginando historias y liberando neurotransmisores que generan placer

Al liberarse neurotransmisores como la dopamina, betaendorfina y cortisol el proceso de estrés en el cerebro provoca disfrute y gozo

Además, en un chisme se comparte información “prohibida” de algo o alguien y eso lo hace más atractivo

Los chismes tienen la intención de difamar o dañar a alguien y existen los de tipo funcionalista e interaccionista

¿Para qué sirven los chismes?

Sirve para tener un beneficio al divulgarlo

Chisme funcionalista

Sirve para interactuar socialmente con un grupo de personas

Chisme interaccionista

La práctica de chismear existe desde que la humanidad vive en sociedades

Fuente: UNAM Global

La vieja práctica del chisme