Luego de que la Procuraduría General de la República (PGR), decidió reclasificar el delito de delincuencia organizada y cambiarlo por el de asociación delictuosa, en contra del exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, nuestra analista Alejandra Cullen señala que la justicia es el eje sin duda, de cualquier transformación que quiera plantearse en este país.
No obstante, señala que la Fiscalía General, tiene una estructura fallida, carece de autonomía, y además es una Fiscalía que no tiene ni siquiera recursos, destacando que los incrementos presupuestales, desde el sexenio pasado, han sido marginales, por lo que ni siquiera hay equipos serios de investigación.
Y cuando digo serios no estoy queriendo descalificar el esfuerzo, estoy segura que hay gente valiosa allá adentro, igual que hay corrupción y hay muchas cosas malas hay gente valiosa, pero no hay recursos para que la Procuraduría genere casos que pueda sustentar ante un juez, señala Cullen.
Nuestra analista política señala que ello nos lleva a los mexicanos a una posición donde hay dos opciones: decir "todos son corruptos y todo está vendido", o decir "simplemente es imposible demostrar la culpabilidad de un individuo".