A una semana del operativo fallido en el norte del país con la aprensión de Ovidio Guzmán, hijo del capo mexicano Joaquín Chapo Guzmán, la atención está sobre México y su gabinete de seguridad, por lo que nuestro colaborador marca algunas pautas que prosiguen.
Y es que funcionarios de Estados Unidos están declarando que México no sabe combatir al crimen organizado y dichos comentarios molestaron al presidente.
Esto a pesar de que, paradójicamente, el mismo jueves que ocurrieron las balaceras y bloqueos en Culiacán, Sinaloa, el secretario de Seguridad en México, Alfonso Durazo, criticó Estados Unidos por no poner control de armas en dicha nación.
Y, aunque en cierto modo tiene razón ya que, sí es problema de la Unión Americana que armas de uso exclusivo del ejército estén a la disposición en mercados, entonces, la reacción del presidente mexicano es entendible pues se está cuestionando la soberanía.
Aunque, expresa Carlos Elizondo Mayer-Serra, también lo es la actitud de las autoridades de Estados Unidos, pues presuntamente, éstas fueron quienes dieron datos de la ubicación del hijo del Chapo y a la hora de detenerlo y el Gobierno mexicano fracasó.
Aunque, el especialista también remarca la importancia de una posible participación de la DEA en este tipo de casos ya que, las fuerzas de seguridad mexicanas podrían ayudarse se esta organización estadounidense por su experiencia en el tema.
Para terminar, Mayer-Serra señala que después del pésimo operativo, la poca información que salió al público por parte del Gobierno, establece que urge la versión de Durazo para que aclare los pormenores que aún no han sido esclarecidos.
Finalmente, el analista establece que ahora importa lo que viene después de estos hechos violentos, tales como la responsabilidad federal pero también del apoyo de las policías locales. Asimismo, no descarta las declaraciones de los gobernantes a nivel municipal y estatal.