A 65 días de la contienda electoral del 1 de julio, Javier Solórzano explica el término de guerra sucia electoral como una estrategia que se ha vuelto común entre los partidos políticos mexicanos para debilitar, desprestigiar y vulnerar al adversario, ya sea dentro o fuera del marco legal.
- Además, el periodista aclara que estos ataques, lejos de desaparecer, se irán incrementando con el paso del tiempo.