El domingo pasado se dieron a conocer los resultados de la consulta ciudadana sobre el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, sin duda una consulta cuestionable por el hecho de que se realizó por un partido político y no por un órgano neutral e imparcial.
Para nuestro analista políticos, estos ejercicios son importantes siempre y cuando sean tomados en serio y existan mecanismos de confiabilidad, sobre todo en un país con una larga trayectoria de fraudes y abusos de la voluntad popular, hay derecho para pensar que esta consulta estuvo muy desaseado.
El problema con las consultas es que se presentan como incuestionables, que no puede ser incluso cuestionado.
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