Ante las diversas denuncias de varias mujeres en redes sociales sobre acoso, violación y abuso sexual, y el suicido de Armando Vega Gil, bajista del grupo Botellita de jerez señalado por estos delitos nuestro comentarista opina que es un problema extraordinariamente complejo.
Creo, por una parte, que el movimiento #MeToo expresa de manera muy clara la necesidad de terminar con relaciones abusivas, con relaciones de opresión del hombre sobre la mujer.
Opina también que es innegable que existan malas condiciones para que la mujeres den la cara, su nombre y denuncien públicamente a quien ha abusado de ellas.
Es muy difícil que aquella persona que han sido víctimas de este acoso, pueda presentar su caso con confianza.