El pasado miércoles 12 de febrero el presidente Andrés Manuel López Obrador se reunió, en una cena, con empresarios que expresaron su respaldo a la decisión de rifar el avión presidencial, logrando acuerdos por más de tres millones de boletos o "cachitos". Luis Rubio retoma el tema y reflexiona sobre lo que esta situación puede significar.
Es impactante el tiempo y recursos que se han dedicado a la rifa relacionada con el avión presidencial, el problema es que una vez que pase la famosa rifa, el avión seguirá estando ahí y se tendrá que seguir pagando su mantenimiento". Luis Rubio, analista.
Rubio cree que el tema de avión presidencial es un "recurso retórico y de distracción" usado por el mandatario mexicano.
Le permitirá al presidente algunos meses de tranquilidad en el tema, pero el tema no se va a resolver". Luis Rubio, analista.
El experto opina que la cena entre López Obrador y los empresarios para organizar el sorteo no es otra cosa más que una forma de arreglo entre el gobierno y esta esfera del país.
Esto nos demuestra a todos los mexicanos que la cena de la semana pasada no es otra cosa más que los viejos arreglos entre los empresarios, sindicatos o quien sea, con el gobierno, para resolver problemas". Luis Rubio, analista.
Nuestro colaborador indica que este tipo de acciones son intolerables para el país.
Durante la conferencia matutina posterior a la cena, el jefe del ejecutivo indicó que a los integrantes de la iniciativa privada se les expuso el motivo de la rifa, que es comprar equipos médicos para hospitales, en lo que "ellos estuvieron totalmente de acuerdo", e indicó que en el encuentro se abordó el tema de la austeridad que se vive al interior del gobierno que él encabeza.